Vista y predisposición
Probablemente alguna vez hayas escuchado el viejo dicho "Comemos con nuestros ojos". La gente tiene una percepción predispuesta de los colores que afecta los sentidos. Ésto es cierto con los colores de las habitaciones, de la ropa y de los alimentos. Cuando se trata de la comida, la presentación juega un papel inicial clave si le restas el sentido del olfato. Una presentación de colores atrayentes de alimentos sin la habilidad de oler puede afectar nuestro cerebro para percibir qué tan delicioso será. Así es como muchos fabricantes de alimentos le añaden colores y tintes a la comida para hacerla lucir más atrayente visualmente. Incluso si el color y la presentación de la muestra falla en alcanzar una expectativa predispuesta, si hace un poco para mitigar cómo esperas que sepa el alimento. La gente ha sido condicionada a aplicar el sabor a ciertos colores y muchos experimentos alterando los colores muestran que tus expectativas sobre los alimentos que estás probando cambian la percepción del sabor de la comida.
Olor
Cuando el sentido del olfato se aplica a los alimentos antes que la presentación, la gente imagina cómo debería lucir el alimento que están oliendo. Los perros calientes y el kétchup, por ejemplo. Si llegaras a preparar perros calientes de la forma en que todo mundo los disfruta, sin permitir que la gente vea la comida, olerán el alimento y anticiparán su apariencia y su sabor. Sus mentes están condicionadas a imaginar la salchicha color carne clara con una línea roja de kétchup encima. Pero si sirvieses perros calientes rojos y los cubrieras con un kétchup de color verde (que alguna vez estuvo disponible) te sorprendería que, después de que el olfato abrió el apetito de los comensales, los colores visuales afectarían directamente en ello. Aunque los perros calientes rojos y el kétchup verde saben exactamente como lo anticipó su sentido del olfato, serían incapaces de sobreponerse a la presentación visual de alimento. Al servir los mismos perros calientes a personas que no ven, verás que se los comen sin ningún problema, debido a que su imagen de la presentación del alimento en su mente cumple con su sabor anticipado.
Cómo usan los colores los restaurantes
Los restaurantes frecuentemente añaden ciertos colores a la decoración del interior para aumentar nuestro apetito. Los rojos y los naranja se consideran grandes amplificadores del apetito. Para incrementar la cuenta promedio de cada consumidor en su establecimiento, los restauranteros astutos aplicarán los rojos y los naranjas a sus paredes y decoración en exhibición, con la esperanza de realzar e incrementar los apetitos. Las guarniciones son otra forma de hacer la presentación de un plato más atrayente. Los colores se consideran frecuentemente cuando se hacen ciertos platillos en los restaurantes. La entrada se sirve frecuentemente con un acompañante y un vegetal de algún color que resalte al acompañamiento y a la entrada. Para una mejor presentación, se añade al platillo una guarnición colorida. Ya sea que el consumidor se coma la guarnición o los vegetales, la combinación correcta de colores en un platillo hace que la entrada luzca más apetitosa en general.
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