Mujeres peligrosas

Por: Dra. Lucy Serrano

Con frecuencia escuchamos recomendaciones y consejos para las mujeres respecto a cómo detectar y alejarse de hombres nefastos (machos, misóginos, controladores, etc.) que pueden dañar sus corazones y arruinar sus vidas. Pero es una realidad que los hombres también están expuestos a caer en manos de mujeres peligrosas que los explotan, manipulan o lastiman emocionalmente. Por esa razón este artículo está dedicado a exponer las características de algunos de los prototipos de mujeres más peligrosas para que los caballeros abran bien los ojos y no caigan en sus redes.

1) LA VAMPIRESA

Este es uno de los tipos más virulentos porque estas mujeres muestran múltiples personalidades según su conveniencia y la clase de víctima que pretendan manipular. A veces se muestran dulces e ingenuas; otras débiles e indefensas buscando un protector que les resuelva la vida o que las rescate de sus problemas; en ocasiones se comportan seductoras y enigmáticas, alternando con actitudes rechazantes fingiendo que están confundidas; también pueden ser groseras y explosivas, o cariñosas y amables.

Como son maestras para fingir y jugar con los sentimientos ajenos, obtienen fácilmente de sus presas dinero, servicios, favores y, por supuesto, atención ilimitada. Aunque la mayoría de los hombres prácticamente se obsesionan con las vampiresas, ellas los toman o los dejan a su antojo porque les es muy fácil conseguir una nueva víctima.

Peligros: Los cambios variables de conducta mantienen al hombre en un constante descontrol emocional, muy enganchados a la relación, alternando entre la fascinación, la desesperación, la impotencia, la culpa y el anhelo no satisfecho. Si te involucras con una de estas mujeres te van a exprimir el bolsillo (estarás furioso cuando te des cuenta que te estafó), acapararán tu tiempo, drenarán tus emociones, desestabilizarán tu mente robándote la paz y te harán pedazos el corazón.

2) LA GOLFA

La principal diferencia con la vampiresa es que es más obvia en su forma de comportarse. Aunque te sientas atraído por su belleza, sensualidad, carisma, manera provocativa de vestirse y modales audaces, rápidamente te darás cuenta que es coqueta y muy dada a la fiesta y el disfrute de los placeres.

Peligros: Si lo único que te interesa es una relación sexual ocasional, no hay mayor problema, salvo que te cuides de una enfermedad de transmisión sexual o de las reacciones emocionales que puedan surgir de parte de otros de sus amantes. Pero si involucras tus sentimientos o permaneces con ella más tiempo de lo conveniente, vas a morirte de celos (recuerda que no eres al único al que le coquetea), tu salud se resentirá debido a tanta desvelada y fiesta, así como tus gastos o deudas se incrementarán considerablemente.

3) LA DIVA

Son mujeres bellas, inteligentes, seductoras, muy seguras de sí mismas. Algunas son artistas, figuras públicas o destacan mucho en algún aspecto profesional y tienen gran carisma que despierta la admiración de otros. No necesitan fingir o manipular como las vampiresas porque no tienen que esforzarse para captar la atención de los hombres, eso se da de manera automática y frecuente. Suelen ser vanidosas y creídas, es muy difícil satisfacerlas permanentemente en sus gustos y actividades porque se aburren con mucha facilidad. Desean a alguien que sea superior o, por lo menos, igual a ellas y les parece casi imposible encontrar a un hombre que les llegue a su altura.

Peligros: Si se trata de una persona inalcanzable para ti, caerás en un amor platónico porque jamás te corresponderá. Pero si te das a la tarea de conquistarla y tienes los recursos para invertir en ella, así como el carácter y la seguridad para asumir el reto, puedes tener muchas satisfacciones porque se trata de mujeres fuera de lo común que te darán grandes alegrías, pero ten en cuenta que también son muy complicadas y a veces inestables. Aunque te acepte como pareja, es muy difícil saber si ella realmente corresponde de igual manera a tus sentimientos o si solamente se deja querer. No te explotará como la vampiresa, porque realmente no lo necesita y suele tener sus propios recursos, pero te saldrá cara porque está acostumbrada a lo bueno.

4) LA VÍCTIMA

Estas son mujeres que sinceramente se creen sufridas y abnegadas (las vampiresas fingen). Sus vidas parecen telenovelas, llenas de dramas y conflictos. Son muy generosas y sacrificadas, pero al parecer todo mundo ha abusado de su buena fe. Generalmente son inseguras, codependientes, temerosas, demandantes, posesivas, celosas, expertas en hacer reproches y generarte culpas.

Peligros: Al principio estarás muy halagado porque te harán sentir especial, fuerte, inteligente, etc., y que ella necesita de tus cuidados, consejos y compañía. Si tienes el gran problema de experimentar sentimientos rescatadores, serás particularmente vulnerable a caer con ellas. Lo que no es tan evidente es que con el paso del tiempo se van a colgar de ti y terminarás asumiendo roles que no te corresponden (su papá, maestro, guía, psicólogo, cuidador, etc.) en lugar de ser pareja. Esto acabará fastidiándote y cuando no te comportes como ella desea o necesita, sutilmente te provocará hasta sacarte de quicio, consiguiendo que la agredas verbal o físicamente para hacerte quedar como el malo de la película. Por ejemplo, si durante una discusión ella se te va encima y le detienes las manos, gritará diciendo que eres tú quien inició la agresión y que la estás golpeando. Son expertas en armar dramas y escándalos.

5) LA OBSESIVA/CODEPENDIENTE

¿Recuerdan la película Atracción Fatal que trata sobre un hombre casado que se involucra en lo que cree una aventura sin importancia con una chica atractiva, aparentemente normal, que después se volvió obsesiva y transformó su vida en una verdadera pesadilla? Tal vez ese sea un caso extremo, pero les aseguro que existen muchas mujeres aparentemente encantadoras que al principio son atentas y cariñosas, que halagan el ego masculino haciéndolo sentir súper especial, pero que después muestran sus profundos conflictos emocionales y es sumamente difícil deshacerse de ellas cuando quieres terminar la relación.

Las primeras señales que las caracterizan son demasiadas llamadas telefónicas o mensajes de texto, mucha demanda de tiempo y atención, reacciones irracionales y exageradas, así como pleitos, reproches y chantajes frecuentes.

Peligros: Te pueden acosar insistentemente, ya sea por teléfono, internet o en persona; presentarse intempestivamente en tu casa u oficina; armarte un escándalo en público sin importarles quién esté presente. Son muy vengativas y no se detienen ante nada para perjudicarte de cualquier manera y hacerte la vida imposible cuando no cumples sus exigencias. No aceptan una terminación y tampoco se puede hablar razonablemente con ellas.

6) LA DOMINANTE

Son mujeres de carácter fuerte y decidido, usualmente muy atractivas para hombres un tanto débiles que inconscientemente requieren de una especie de figura materna que los dirija, los proteja y los guie. Se ven muy seguras de sí mismas, muy eficientes y que en su presencia todo sale bien o que te pueden impulsar a grandes logros (el mito que detrás de todo gran hombre hay una gran mujer).

Peligros: El problema con estas mujeres es que son controladoras, necias, dominantes, intolerantes, impositivas, con tendencia a anular y a minimizar a su pareja, el cual terminará sintiéndose devaluado en su hombría y actuará como un niño temeroso frente a ella.

7) LA CAPRICHOSA

Son chicas generalmente bonitas (pero no necesariamente espectaculares) que fueron muy halagadas o consentidas de niñas. Fundamentan su valor en el aspecto físico o en la posición económica y no en su inteligencia o personalidad (que suele ser muy escasa). Sin embargo, creen que se merecen a un príncipe azul que cumpla con todos sus caprichos y exigencias.

Peligros: Pueden ofrecer la satisfacción de estar junto a una persona atractiva, pero con tantos defectos de carácter y tan poco interesantes que más pronto que tarde terminarás aburrido y fastidiado de su inmadurez y frivolidad, sin contar lo caro que te saldrá satisfacer sus exigencias.

Las mujeres descritas suelen despertar en mayor o menor medida la atención de los hombres en las etapas iniciales del contacto y fácilmente pasan desapercibidas sus características negativas porque, a simple vista, parecen personas inofensivas y agradables. De ahí que muchos caballeros no se den cuenta del riesgo que implica relacionarse con ellas hasta que ya padecen las consecuencias. Además bastantes hombres creen ingenuamente tener la suficiente experiencia en mujeres, lo que los lleva a actuar con tan excesiva confianza en sí mismos que acaban siendo “cazados” por alguno de estos tipos. De ahí la importancia de que, antes de involucrarse seriamente, se detengan un poco para observar con cuidado la forma de ser y comportarse de su candidata a pareja, de lo contrario es muy probable que terminen metidos en graves problemas que los harán sufrir mucho.

Si al leer esto te das cuenta que ya convives con una mujer peligrosa del tipo vampiresa, golfa o diva, te convendría considerar la terminación y el alejamiento lo más pronto posible, porque con ello mantendrás a salvo de daños mayores tus sentimientos, salud y economía. Pero si tu caso implica tratar con mujeres de los tipos víctima, obsesiva, dominante o caprichosa no creas que con simplemente decir que terminas la relación será suficiente para deshacerte de ella, porque precisamente lo complicado es que no se dejan terminar y te seguirán acosando y manipulando para que permanezcas a su lado o tratarán de hacerte la vida imposible en desquite por abandonarlas. Lo mejor es que te apoyes en una buena asesoría psicológica que te enseñe como manejar la situación.

Si eres mujer y te sentiste identificada con uno de los prototipos descritos, también considera la posibilidad de acudir a terapia para curar las heridas, malas experiencias y cambiar las ideas equivocadas que te llevaron a ser así. Aunque aparentemente te salgas con la tuya durante un tiempo, los muchos casos que he visto confirman que estas mujeres, cuando no rectifican, terminan solas, muy insatisfechas, con un profundo sentimiento de culpa y sufrimiento, además de perder definitivamente la posibilidad de disfrutar una verdadera relación de pareja. En tus manos está modificar el camino y aprender a amar sanamente.